La infanta Elena no ha rehecho su vida desde que se divorció de Jaime de Marichalar en 2009. Es el padre de sus dos únicos hijos, Froilán y Victoria Federica. A pesar de ellos, no tienen ningún tipo de relación. Han coincidido en algún acto y ni tan siquiera se han saludado. Según fuentes cercanas a Zarzuela, la hermana de Felipe VI vivió un auténtico infierno al lado del exduque de Lugo y deseaba con todas sus fuerzas divorciarse y perderle de vista para siempre, por ello nunca le saluda. Vivió como una esclava, no era una mujer feliz.
En estos últimos años, en los que sus hijos ya son mayores y hacen su vida, la infanta Elena se ha centrado totalmente en Juan Carlos I. Desde que vive en el exilio le ha visitado en más de 60 ocasiones, y también le ha acompañado siempre en sus