San Lorenzo enfrenta una crisis institucional sin precedentes. La renuncia masiva de varios miembros de la Comisión Directiva ha llevado a la declaración de acefalía, lo que significa que el club se encuentra sin una dirección clara. Marcelo Moretti, quien ocupaba la presidencia, ha dejado su cargo en medio de un clima de tensión y descontento entre los socios.
El detonante de esta situación fue la dimisión del bloque liderado por el vicepresidente segundo, Andrés Terzano, junto a otros directivos como Mateo Sagardoy, Leandro Virardi y María Soledad Boufflet. Con estas renuncias, la Comisión Directiva quedó con menos de diez integrantes, el mínimo necesario para su funcionamiento. Martín Cigna, ex secretario del club, confirmó la situación en una conferencia de prensa, afirmando que "la acefalía es el resultado de esta gestión" y que la Asamblea será la encargada de definir quién asumirá el control del club.
La reunión de la Comisión Directiva, que se llevó a cabo en el estadio Pedro Bidegain, estuvo marcada por la ausencia de Moretti y de Néstor Ortigoza, un exjugador emblemático del club. Moretti justificó su falta por razones de seguridad, mientras que Ortigoza ha sido objeto de críticas por parte de los hinchas. Fuera del estadio, decenas de aficionados se manifestaron, expresando su descontento con la dirigencia mediante pancartas que exigían responsabilidad y pedían la renuncia de Ortigoza.
La crisis se ha intensificado debido a las acusaciones de corrupción que rodean a Moretti, quien fue denunciado por recibir un pago en efectivo de manera irregular. A pesar de haber regresado de una licencia, su gestión se encontraba en un estado crítico, con una división interna que complicaba aún más la situación. La oposición ha solicitado elecciones anticipadas, proponiendo que se realicen el próximo 21 de diciembre.
La acefalía en un club se produce cuando sus autoridades principales dejan de ejercer sus funciones, lo que deja a la institución sin una dirección estable. En este contexto, San Lorenzo se enfrenta a la necesidad urgente de definir su rumbo y restablecer la paz interna, mientras los hinchas continúan presionando por un cambio en la dirección del club.