Pedro Rosemblat entrevistó a Gustavo Cordera en el ciclo de streaming Gelatina, y desató una fuerte polémica en redes que, a su vez, reabrió el debate sobre los límites de la libertad de expresión, la responsabilidad de los medios y la vigencia de ciertos discursos.
Ante el aluvión de críticas, el conductor salió a defender su decisión de invitarlo: “El derecho a la palabra lo tiene todo el mundo. Entrevistar a cualquier persona es algo que debe estar habilitado. Lo que sí acepto es que no estuve bien en mi rol de entrevistador”.
Rosemblat explicó que la nota surgió luego de que el exlíder de Bersuit Vergarabat se comunicara con el programa para expresar su malestar por el uso de sus canciones en distintos contenidos del ciclo. También justificó su postura en la línea editorial de Gelati