El Manchester United estuvo en contacto con el Barça durante el verano con el propósito de llegar a un acuerdo por el traspaso de un jugador que consideraban que era muy interesante. Aprovechando las negociaciones por Marcus Rashford, y las buenas relaciones institucionales que existen entre ambos conjuntos, los ingleses no lo dudaron a la hora de colocar encima de la mesa el nombre de un crack que se había colado en su lista de objetivos.
Y es que creían que Ferran Torres podía tener un papel muy importante en los sistemas de Rubén Amorim , gracias a su increíble polivalencia, su experiencia y la fantástica campaña que había completado en el Camp Nou . Porque no necesitó ser titular indiscutible para finalizar con unas estadísticas sensacionales, anotando un total de 19 dianas en