El pasado 13 de septiembre se celebró el día del programador, por tratarse del día 256 del año: ese número remite a las combinaciones posibles en un código de ocho bits. En estos tiempos se presenta la disyuntiva acerca de si la inteligencia artificial (IA) es una aliada o una amenaza para los programadores. Durante años, los programadores fueron vistos como “rockstars” del mundo laboral: profesionales altamente demandados, con múltiples ofertas de trabajo diarias y salarios que los ponían en la cima del mercado.
Sin embargo, hoy ese escenario cambió. La aparición de la IA, el auge de las plataformas low-code y una mayor competencia en el sector obligan a repensar qué significa ser programador en la actualidad.
En este sentido, Ariel Hitner, delivery manager Microsoft 365 de Softtek, ase