BUENOS AIRES (AP) — El presidente Javier Milei sufrió un nuevo revés político el jueves luego de que el Senado rechazó su veto a una ley que establece el reparto automático de fondos del Estado a las provincias, en medio de un clima de creciente inestabilidad en los mercados financieros.

Con el impulso del peronismo —la fuerza con mayor peso en esa cámara—, el Senado ratificó por 59 votos a favor, nueve en contra y tres abstenciones la norma que contempla una redistribución de los aportes del tesoro nacional a las 23 provincias y la Ciudad de Buenos Aires que fue vetada por Milei días atrás con el argumento de que rompe con el equilibrio fiscal, columna vertebral de su programa económico.

Para que la ley siga en pie es necesario que al menos dos tercios de la Cámara de Diputados vote en el mismo sentido que el Senado. El oficialismo está en clara desventaja en ambos recintos.

Milei sufrió una nueva derrota parlamentaria apenas 24 horas después del contundente revés en la Cámara de Diputados cuando una amplia mayoría de la oposición rechazó otros dos vetos a sendas leyes que otorgan mayores fondos a universidades públicas y hospitales pediátricos.

El Senado deberá decidir en los próximos días si avala la postura de los diputados, lo que mantendría en pie ambas normas, que, según reprocha el presidente, no especifican de dónde saldrán los recursos para cubrir los gastos que contemplan.

Milei arremetió en X contra el kirchnerismo, el sector de centroizquierda del peronismo que es particularmente combativo contra su gestión, y también contra conservadores que fueron sus aliados y le están dando ahora la espalda con legislación que aborda asuntos sensibles de la agenda social.

Sobre estos últimos, el mandatario de extrema derecha dijo que son "antikukas (antikirchneristas) que votan igual que los kukas pero disfrazados de republicanos”.

El ministro de Economía, Luis Caputo, sostuvo por su lado que "todos sabemos a esta altura que lo que están tratando de hacer es voltear al presidente que salvó al país de caer en la peor crisis de su historia”.

La ley que obliga al gobierno a repartir fondos de forma automática a las provincias es impulsada por todos los gobernadores en un contexto de creciente tensión con el gobierno nacional por la falta de asistencia financiera.

El desafío de los mandatarios provinciales y del Congreso tiene lugar en el peor momento desde que Milei llegó al poder a fines de 2023 y a poco más de un mes de las elecciones en las que se renovará el Congreso nacional, que funcionarán como una suerte de referendo sobre su gestión.

El oficialismo sufrió una amarga derrota el 7 de septiembre en la elección de legisladores provinciales en el distrito de Buenos Aires, el más importante del país a causa del creciente malestar de la ciudadanía con una economía que no ha mejorado la situación de muchos. Ese traspié sacudió los mercados financieros disparando el valor del dólar, la moneda en la que refugian los argentinos, y aumentó el riesgo país.

El dólar cotizó a 1.495 pesos por unidad en el mercado de cambios oficial, la cifra más alta de la que se tenga registro. En el segmento mayorista, la divisa perforó el techo de la banda de flotación de 1.474,83 pesos por unidad fijada por el gobierno.

En tanto que los bonos argentinos cayeron en promedio 7%, mientras que el riesgo país superó la barrera de los 1.400 puntos.

El portavoz presidencial, Manuel Adorni, intentó llevar tranquilidad afirmando que “el esquema está preparado para que no haya ningún problema" y el Banco Central pueda intervenir en el mercado para asegurar la banda de flotación que actualmente establece un piso de 948,76 pesos y un techo a 1.474,83 pesos por unidad.

El funcionario cuestionó la postura de la oposición en momentos en que el gobierno ha anunciado en el proyecto de presupuesto 2026 mayores partidas para la educación, los jubilados y los discapacitados —tres sectores afectados por los recortes de Milei—y apuntó que subyace la intención de "que no puedas gobernar y por eso apelamos a que en (en las legislativas de) octubre eso cambie”.