Por Fernando Laborda, en diario La Nación
Pero esa percepción cambió por completo después de la derrota de la coalición de Javier Milei en los comicios bonaerenses del domingo 7. Hoy prevalece la imagen de un gobierno no solo debilitado políticamente y goleado sistemáticamente en cualquier votación parlamentaria, sino también golpeado por una corrida cambiaria y por la estampida del riesgo país.
Al parecer, la mejor idea que hasta ahora han tenido las principales cabezas de La Libertad Avanza para transformar esa debilidad en fortaleza no es otra que insinuar la tentativa de un “golpe blando” y recrear la estrategia polarizadora con el kirchnerismo. Así como el vocero presidencial, Manuel Adorni, afirmó que detrás de la movilización del miércoles último contra los vetos del Gobierno “se