"Fue un acto muy bonito y emocionante" , dice Fernando Martínez (Vélez-Blanco, Almería, 1949) sobre la entrega en Grado el pasado sábado de diplomas de "Reconocimiento y reparación" a los familiares de 33 moscones víctimas de la Guerra Civil y el franquismo. "Es una reparación que fundamentalmente es moral, pero que tiene una gran fuerza porque el Gobierno de España declara a sus familiares como víctimas", describe el secretario de Estado de Memoria Democrática .
¿Qué importancia tiene?
Sus padres, sus abuelos, habían pasado por las cárceles, algunos habían sido fusilados, siempre han estado criminalizados, estigmatizados e invisibilizados. Ahora se les declara víctimas por la ley de Memoria Democrática. Sus nombres estaban en el olvido e incluso en el seno de las familias en muchos