Cuando una persona fallece, no solo deja memorias y afectos: también deja asuntos financieros que deben resolverse con cuidado. Entre ellos, uno de los más frecuentes es el destino del dinero guardado en sus cuentas de ahorro.

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¿Quién puede reclamarlo?, ¿cómo se accede a esos recursos?, ¿qué dice la ley sobre herederos y beneficiarios? Entender este proceso no solo evita conflictos familiares, también garantiza que el esfuerzo de toda una vida llegue a las manos correctas.

El proceso

De acuerdo con información del Ministerio de Justicia, cuando el titular de una cuenta bancaria fallece, el o los herederos pueden acercarse al banco o entidad financiera donde el fallecido tenía depositado su dinero

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