Aunque Marco Fabián ya tiene un tiempo que no juega futbol a nivel profesional, no ha anunciado su retiro oficial porque aún tiene un sueño que cumplir: llevar al equipo que preside, el Rangers FC de Andorra, a jugar la Champions League para calzarse las botas por última y vez y jugar, aunque sea cinco minutos, el único torneo que le faltó disputar en su dilatada carrera como futbolista.
Pero, aunque no cumpla ese sueño, aún tiene muchas metas que realizar: como llevar más talento mexicano a Europa, crecer en sus negocios y, un día, ser presidente del club de sus amores.
“Sigo todavía teniendo sueños que cumplir, ahora fuera de la cancha. Ahora estoy haciendo mis pininos en un equipo europeo, pero no me cierro las puertas a un día ser presidente de un club importante y, como todo el mund