En Villa Carmela , San Miguel de Tucumán, se vivió una situación insólita: un joven irrumpió en su propio funeral al grito de “¡Estoy vivo!”. El hecho ocurrió por un error de identificación de un cuerpo que, hasta el momento, continúa sin ser reconocido.
Todo comenzó en la noche del jueves, cuando un joven murió tras ser atropellado por un camión . Minutos después, una madre reconoció el cuerpo y, en medio de la confusión, lo identificó erróneamente como el de su hijo.
Fue así como la familia organizó el velorio. Sin embargo, en plena ceremonia, el verdadero joven apareció en el lugar sano y salvo. Mientras tanto, el cuerpo del fallecido aún permanece sin identificar.
La identificación del cuerpo
Según relatan medios tucumanos, el episodio comenzó en la madrugada del jueves, en