El Théâtre du Châtelet de París acogió este lunes la prestigiosa gala del Balón de Oro. Ousmane Dembélé fue el gran nombre de la noche en la categoría masculina, saliendo condecorado como el mejor futbolista del planeta y recibiendo el anhelado trofeo de la mano de Ronaldinho.
El 10 del PSG , tras 5 títulos conseguidos y con 35 goles y 15 asistencias en el total de 53 partidos que disputó durante la pasada temporada, se impuso a Lamine Yamal en la votación final, que era el otro gran candidato a heredar el trono de Rodri, hasta este lunes ostentador del premio. De poco sirvieron los numerosos apoyos que tenía el crack del Barça entre leyendas del fútbol, compañeros de equipo, amigos y familiares que se encontraban entre los asistentes a la velada. Ni siquiera funcionaron lo