En el limbo de la articulación del PRI Hidalgo , frente al infausto suceso de la nominación a la gubernatura de su l íder Marco Mendoza , que, a todas luces, revela que la polí tica interna en este partido es antidemocracia pura y que sus tonalidades de opresión y subordinación a la base militante arrojan saldos negativos en la legitimidad y credibilidad a título de precariedad y crisis política.
En este trazo de marasmo político del PRI Hidalgo se predisponen los intereses de una c ú pula vertical sobre la precaria base militante que aún le queda y deja abierta la reflexión de los elementos que han derivado la represión política que viven sus estructuras.
I. La verticalidad pol í tica vs la democratización de partido
Una de las anomias más significativas y perversas