La Casa Blanca habla de "sabotaje" y pide "despidos" por una escalera que se paró cuando subía Trump y siembra sospechas por fallos del 'telepromter'
Esta semana nos toca Asamblea General de la ONU en Nueva York. La ciudad se vuelve imposible para moverse por las medidas de seguridad, sobre todo este martes, cuando ha estado Donald Trump, que va acompañado siempre de medidas extraordinarias.
Desde el lunes, se han estado manifestando en los alrededores varios centenares de personas condenando el genocidio israelí en Gaza, y se prepara una marcha multitudinaria el viernes coincidiendo con la intervención de Benjamín Netanyahu. El primer ministro israelí, perseguido por la justicia internacional por crímenes de guerra, se paseará por aquí libremente, mientras los gobernantes palestinos no han podido venir porque EEUU les ha denegado el visado para entrar en el país.
Este es el mundo en el que vivimos en EEUU. Y a menudo EEUU ha sido el futuro a donde terminaba llegando Europa. Está por ver si esta vez también es así.
Es un mundo de sospechas, denuncias, listas negras y persecución del oponente. En los últimos días hemos repasado cómo la Administración Trump está asaltando la justicia y los medios de comunicación, y de cómo en su discurso de 58 minutos ha hecho un alegato fiel a su agenda ultra en todos los aspectos de la vida.
Una muestra de ese estado de violencia constante en el sentido más amplio del término la hemos vivido este martes a consecuencia del fallo en una escalera cuando subían Donald Trump y su esposa, Melania Trump, y, también, de los fallos en el teleprompter.
La Casa Blanca lo tiene claro: a partir de un artículo de The Times en el que se mencionaba la posibilidad de que personas de la ONU cometieran algún acto de sabotaje para protestar por los recortes radicales de fondos de EEUU, ha lanzado una campaña denunciando un presunto sabotaje sin prueba alguna.
Si alguien en la ONU paró intencionadamente la escalera mecánica mientras el presidente y la primera dama subían, debe ser despedido e investigado inmediatamente“, ha tuiteado la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt: despido e investigación.
El Departamento de Seguridad Nacional también se apunta a las acusaciones sin pruebas: “Personal de la ONU en Nueva York saboteó las escaleras mecánicas del edificio de la ONU. También saboteó el teleprompter de Trump para avergonzarlo”.
Sin embargo, la corresponsal en la ONU de la agencia de noticias The Associated Press, Farnoush Amiri, ha publicado la versión de la ONU tras investigar el caso, que es bastante distinta: “La investigación, que incluyó una lectura de la unidad central de procesamiento (UCP), indicó que la escalera mecánica se detuvo tras activarse el mecanismo de seguridad integrado en el peldaño de peine en la parte superior”.
Según la ONU, “el camarógrafo [que subió antes que Trump] podría haber activado inadvertidamente la función de seguridad. El mecanismo de seguridad está diseñado para evitar que personas u objetos queden atrapados accidentalmente, atascados o arrastrados por el engranaje”.
“O nos vamos de la ONU o tiramos una bomba”
Jesse Waters, uno de los rostros más incendiarios de la Fox, ha asumido con los ojos cerrados la versión de la Casa Blanca y ha doblado la apuesta. “Sabotearon la escalera,, sí. Y podrían haber hecho daño a la primera dama. Trump se habría caído y se habría levantado, y habrían criticado su retórica. Y luego sabotearon el teleprompter. Esto es una insurrección, y lo que tenemos que hacer es dejar la ONU o tirar una bomba allí”.
El propio Trump ha mencionado los problemas con la escalera y el telepromter durante su intervención de 58 minutos. Y también ha aludido a ello en un post en Truth Social: “Fue un gran honor hablar ante las Naciones Unidas. Creo que el discurso tuvo una excelente acogida. [...] ¡Espero que todos puedan verlo! El teleprompter estaba roto y la escalera mecánica se paró repentinamente mientras subíamos, pero ambos sucesos probablemente hicieron que el discurso fuera más interesante de lo que habría sido de otra manera”.
Varios comentaristas e influencers MAGA se sumaron al akelarre.
La ONU financia abiertamente la invasión de inmigrantes ilegales a nuestro país. Pararon la escalera mecánica cuando el presidente Trump la subió. Interrumpieron su teleprompter durante el discurso de Trump. Hay que desfinanciar la ONU“, dijo Rogan O’Handley, abogado y comentarista de America First.
Laura Loomer, otra referente del MAGA, tuiteó: “Esto es sabotaje. Hay que declarar persona non grata al secretario general de la ONU, António Guterres ya. ¡No puede vivir cómodamente en Nueva York y socavar a nuestro gran presidente!”
Trump tiene previsto dejar este martes por la noche Nueva York para marcharse a Washington. El miércoles tendremos la intervención del rey, por primera vez desde 2016, ante la Asamblea General. Y habrá que ver si pronuncia la palabra genocidio para hablar de la masacre israelí en Gaza.
Por la tarde, rueda de prensa con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y posteriormente hay fuera un acto de homenaje a Jose Mujica con líderes latinoamericanos al que también acude Sánchez.
El colofón de la semana llegará el viernes con la marcha ciudadana por Palestina en las calles y la intervención de Netanyahu en la sala.
Todo eso y mucho más te lo intentaré contar puntualmente en elDiario.es.
Muchas gracias por estar ahí, y hasta la semana que viene.
Un saludo
Andrés