Jannik Sinner regresa a las pistas en Pekín tras la derrota que sufrió ante Carlos Alcaraz en la final del US Open el pasado domingo 7 de septiembre. Ese día el italiano se vio sorprendido por una versión mejorada del tenista murciano, mucho más incisivo al resto, con un saque demoledor, una movilidad eléctrica y una fortaleza mental granítica. Y es que, como admitió Juan Carlos Ferrero, todo el equipo estuvo durante dos semanas analizando la derrota en la final de Wimbledon para encontrar las soluciones y las mejoras necesarias para derrotar al tenista de San Cándido.
El propio Sinner reconoció que se encontró a "un jugador diferente" en Flushing Meadows y que él fue un jugador demasiado predecible, una circunstancia que le va a obligar a realizar cambios en su juego en la