En agosto, la venta de combustibles se desplomó 2,86 por ciento mensual y apenas aumentó 0,41 por ciento interanual, medido contra la base de comparación retraída de 2024. Los datos reflejan una realidad inocultable: la caída del consumo, el parate de la actividad productiva y el impacto de la escalada en el tipo de cambio que mueve los costos en dólares. Y una tendencia de época: mientras los productos prémium se disparan, el diésel común va para abajo y en picada.
El reporte publicado por el sitio especializado Surtidores señala que los productos prémium continúan liderando las ventas: 15,56 por ciento la nafta y 10 por ciento el gasoil G3. Sin embargo, a diferencia de lo que ocurrió en los meses previos, la cantidad de litros demandados por los grupos de poder adquisitivo alto no f