La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) llevará a cabo una revisión de la seguridad y eficacia de la mifepristona, un medicamento utilizado en abortos con medicamentos. Esta decisión fue anunciada por el secretario de Salud y Servicios Humanos, Robert F. Kennedy Jr., y el comisionado de la FDA, Dr. Marty Makary, en una carta dirigida a 22 fiscales generales republicanos. En la misiva, se afirma que la FDA realizará una revisión exhaustiva de la evidencia relacionada con la mifepristona.
Kennedy y Makary aseguraron que el gobierno se compromete a proteger la salud de las mujeres investigando las condiciones bajo las cuales la mifepristona puede ser dispensada de manera segura. La carta, enviada el 19 de septiembre, ha generado inquietud entre los defensores del derecho al aborto, quienes temen que se impongan nuevas restricciones al acceso a este medicamento, especialmente tras su expansión a través de la telesalud en los últimos años.
El secretario de Salud ya había informado a los senadores que la FDA está recopilando nuevos datos sobre la mifepristona y que estos estudios están en curso. Durante una audiencia, Kennedy afirmó que el Gobierno de Biden había “tergiversado los datos” sobre el medicamento, aunque no proporcionó detalles específicos sobre las preocupaciones de seguridad.
La mifepristona, aprobada por la FDA en el año 2000, se utiliza comúnmente junto con el misoprostol para interrumpir embarazos hasta las 10 semanas de gestación. Desde su aprobación, se han registrado cinco muertes asociadas con su uso por cada millón de personas, lo que representa una tasa de mortalidad del 0,0005 %. La seguridad de la mifepristona ha sido comparada con la de analgésicos de venta libre como el ibuprofeno.
Grupos médicos, como el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos, han solicitado una mayor accesibilidad a la mifepristona. Durante la pandemia de COVID-19, el Gobierno de Biden permitió que proveedores certificados recetaran el medicamento a través de consultas telemáticas, lo que facilitó su acceso, especialmente en áreas rurales.
Sin embargo, activistas en contra del aborto han cuestionado la seguridad del medicamento y han instado al gobierno a restringir su distribución a consultas presenciales. En junio de 2024, la Corte Suprema de Estados Unidos evitó bloquear la disponibilidad de la mifepristona, pero dejó abierta la posibilidad de futuros cambios regulatorios.
En 2024, se registraron más de un millón de abortos en EE.UU., según el Instituto Guttmacher. Desde la decisión Dobbs de la Corte Suprema en junio de 2022, que revocó el derecho federal al aborto, 20 estados han implementado prohibiciones o restricciones severas, mientras que otros han establecido nuevas protecciones para la atención del aborto. La telesalud ha contribuido al aumento de abortos, con un 14 % de ellos realizados en clínicas exclusivamente en línea en 2024, en comparación con el 10 % en 2023.