Fernando Belasteguín colgó la pala de pádel hace nueve meses, pero como ganador nato que es, este jueves siguió añadiendo nuevos elementos a su palmarés. El último ha sido el MARCA Leyenda que otorga este diario a los deportistas de diferentes disciplinas que han conseguido cosas extraordinarias. Un club en el que no podía faltar alguien de tal calibre y al que, por qué no decirlo, me empeñé que entrase, fuera como fuera.

Ya antes incluso de su retirada, y viendo la talla de los nombres que han recibido el galardón, insistí como el que más para que se valorase su premiación. Creo que es lo mínimo que un gigante como MARCA podía hacer con un jugador que, a pesar de haber acaparado todos los focos desde hace décadas, nos trató siempre de lujo.

Y no, no se vayan a pensar ustedes que Be

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