Carlos Alcaraz ya está en octavos de final del ATP 500 de Tokio tras imponerse a Sebastián Báez en un accidentado partido en el que terminó con el pie vendado y que estuvo parado por lluvia en el primer set. El tenista murciano se torció el tobillo durante el encuentro y, durante un rato, pareció que no iba a poder continuar el partido. Tras el encuentro, el de El Palmar ha hablado sobre las sensaciones que tuvo en el quinto juego contra el argentino.
"Pasé miedo, no voy a mentir. Me he preocupado porque no me encontraba bien al principio", explicaba el número uno al término del encuentro. "Estoy contento de haber podido acabar y hacerlo jugando un buen tenis. Voy a intentar hacer lo posible para estar recuperado de cara al siguiente partido", continuaba explicando.
Ahora queda esperar p