Alucinante lo caradura que puede ser la prófuga ex primera dama, Eliane Karp, quien en su reaparición ante los ojos de los peruanos a través del programa de Milagros Leiva, en Willax, ha tratado de ponerse en plan de víctima al lado de su esposo Alejandro Toledo, el dos veces condenado por ladrón y sinvergüenza que se levantó el peso millones de dólares sucios que le permitieron comprar una mansión en Las Casuarinas y una oficina en Torre Omega, y cancelar las hipotecas de sus casas de Camacho y Punta Sal.
Venir a decirnos que Toledo está preso con dos condenas porque organizó la Marcha de los Cuatro Suyos en julio del 2000 contra el gobierno corrupto de Alberto Fujimori, o porque hay racismo y persecución política de por medio, es una mentira tan grande como la fortuna que acumularon ell