Cocinar en el extranjero es una mezcla de retos, responsabilidades y oportunidades, en especial si preparas los icónicos platos de la gastronomía peruana. Yuki Nakandakari puede darse el lujo de decir que es un embajador de nuestra comida en Estados Unidos , pero su historia tuvo un inicio y un camino de sabor agrio. Desde niño, sabía que sus manos se dedicarían al arte culinario. Su familia, en cambio, quería que se enfocara en otra profesión.

Con una pizca de valentía, reunió fuerzas para viajar a Japó n, de donde procede su línea paterna, y tuvo la libertad costosa para iniciar su trayectoria gastronómica. Aquella decisión sembró su destino y, 30 años después, se enorgullece porque puede dedicarse a su mayor pasión en los Estados Unidos. Es más, tiene el privilegio de compartir l

See Full Page