Transcurrieron más de dos años desde que pedí al ICA investigar la importación de semillas de café robusta desde Brasil. Mismo tiempo desde que cerca de dos mil familias cafeteras movilizadas en Armenia solicitaron al gobierno nacional, entre otras, activar la salvaguardia comercial declarada ante la Organización Mundial del Comercio OMC, que contempla un arancel hasta del 70 % para café importado con el fin de proteger el café colombiano. No obstante, ni la una ni la otra fueron atendidas.

Son comprobables los perjuicios ante el diluvio de café brasilero sobre Colombia como consecuencia de los aranceles que Estados Unidos impuso a Brasil, quien a su vez apunta a que los colombianos paguen los platos rotos. Al revisar las cifras de la DIAN, puede verse que las importaciones desde Brasil p

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