La memoria se ocupa de guardar lo que las personas viven, con las circunstancias de tiempo, modo y lugar que hayan correspondido. De ahí que la historia se deba ceñir a dar cuenta de lo ocurrido a los seres vivos y asociando su existencia a las cosas materiales que de alguna manera hayan sido elementos de su existencia.
Memoria es recordar lo que fue, como fue y tratando de no desvirtuar, lo que no es fácil, pues en la narrativa necesariamente se van a dar elementos emocionales que corresponden a las exigencias de quien cuenta esa historia.
La historia es una sola. Pero hay muchas manera de contarla. Se ha dicho, incluso, que la historia depende en mucho de quien la cuente. En las guerras una es la manera de contarlas de los vencidos y otra bien distinta la de los vencedores (si es que e