La selección de Nueva Zelanda ratificó su poderío en su histórico fortín de Eden Park al vencer por 33-24 a Australia, en un duelo electrizante correspondiente a la quinta fecha del Rugby Championship. Con este triunfo, los All Blacks estiraron a 52 su racha de partidos sin perder en ese escenario, donde parecen invencibles.
El conjunto neozelandés llegaba golpeado por la derrota sufrida el 13 de septiembre ante Sudáfrica en Wellington, pero logró recuperarse con una actuación sólida en ataque ante unos Wallabies que no encontraron la manera de dar el golpe después de la caída frente a Los Pumas en Sydney.
El inicio fue parejo: James O’Connor abrió la cuenta para Australia con un penal, pero rápidamente los locales respondieron con una patada de Beauden Barrett y los tries de Leroy Carte