La Unión Europea lleva algo más de un año aplicando los “derechos compensatorios” a los vehículos eléctricos chinos . Esta tasa se aplica, realmente, a todos los fabricantes que producen en China y luego traen sus coches a suelo europeo. ¿El objetivo? Que las empresas fabriquen en Europa. Pero si todas las miradas apuntan a China, otros países se abren paso. Marruecos no es la única que se está consolidando como el trampolín estrella a Europa: Turquía está pidiendo paso.
Y no es algo que estén aprovechando las marcas chinas: también las europeas.
Trampolines . La industria automotriz china tiene un objetivo sencillo: conquistar el mundo con sus coches eléctricos . Las compañías tienen la experiencia, la tecnología, los barcos para transportar miles de coches de una tacada y so