El brote de gusano barrenador en Nuevo León no fue un accidente, sino la consecuencia de advertencias ignoradas y supervisión débil. El saldo actual es la caída de ingresos, precios distorsionados, credibilidad sanitaria dañada y un posible conflicto bilateral bajo el paraguas del T-MEC, informó el director de NexusAgronegocios, César Rafael Ocaña Romo.
Agregó que a lo anterior se suma la presión de la carne importada de Brasil, país con el que no tenemos tratado de libre comercio, y que puede convertirse en una amenaza que desplace a la engorda nacional y con ello a toda la cadena de suministro de carne bovino-mexicana.
El especialista resaltó que desde julio se detectaron cargamentos infectados en el sur; en septiembre, SENASICA advirtió que animales con gusaneras estaban pasando inspe