La carga inductiva, una tecnología conocida desde hace más de medio siglo en los cepillos de dientes eléctricos y popularizada en los móviles a partir de 2009 y que no había llegado al mundo del automóvil, da ahora el salto a los coches. Porsche ha anunciado que ofrecerá de serie un sistema de carga inalámbrica de 11 kW para su gama eléctrica, estrenándose en el nuevo Cayenne Electric cuyo lanzamiento mundial está previsto a finales de este año.
La clave para ponerla en práctica está en la mejora de la eficiencia : hasta ahora, la carga por inducción en automóviles no había logrado implantarse más allá de algunas aplicaciones experimentales debido a las elevadas pérdidas de energía que la hacían poco práctica frente al cable. Sin embargo, el sistema de Porsche promete una eficiencia d