La Silla Azul es probablemente la prueba más traicionera de Pasapalabra. Manu y Rosa pueden dar fe de que incluso ellos, pese a su experiencia, son víctimas a menudo de la tensión que se vive. Para los aspirantes, esa sensación de nervios es aún mayor, como se ha visto en este programa.
Cristina ha recibido a Flores aconsejándola que dejara los nervios fuera. Sin embargo, cuando ha empezado la prueba, se ha visto superada. Ha comenzado acertando, pero ha fallado ya su segunda pregunta. “Es normal”, ha comentado Roberto Leal, invitándola a tranquilizarse y a seguir jugando.
Sin embargo, la aspirante ha vuelto a equivocarse en su siguiente respuesta, poniendo fin a una Silla Azul muy breve para Rosa. “Los nervios juegan malas pasadas”, ha explicado el presentador. Los concursantes