El Chelsea versus Benfica de este martes en la Champions League estuvo marcado por los reencuentros.
Primero, José Mourinho volvió a Stamford Bridge para encontrarse con uno de los clubes donde más brilló como entrenador.
Desde la otra vereda, el argentino Enzo Fernández se volvía a cruzar con el Benfica, su primer club en Europa , aunque la recepción no fue la esperada.
Cuando el volante formado en River Plate se disponía a lanzar un tiro de esquina, desde la grada donde se ubicaban los hinchas portugueses le llovieron proyectiles , recordándole su salida del equipo rumbo al Chelsea en una millonaria venta.
Tal fue la intensidad de los objetos arrojados que el propio José Mourinho tuvo que acercarse al sector del córner , pidiendo a sus aficionados que se calmaran.