
El Pentágono adjudicó a Lockheed Martin un nuevo contrato, valorado en 647 millones de dólares, para la producción de misiles balísticos intercontinentales para submarinos, con cabezas nucleares, y unidades Trident II (D5), más el soporte de sistemas desplegados.
El acuerdo, suscrito el martes por el Departamento de Guerra de Estados Unidos, incluye incentivos de precio fijo y costo más tarifa, además de partidas opcionales que podrían elevar el monto total hasta los 745 millones de dólares . El contrato también contempla beneficios para una venta militar extranjera destinada al Reino Unido.
El cronograma establece que los trabajos estarán finalizados para el 30 de septiembre de 2030, en el marco del mantenimiento y modernización de uno de los pilares de la disuasión nuclear naval estadounidense.
Este lunes, Lockheed Martin obtuvo otro contrato de aun mayor magnitud: 12.500 millones de dólares para la producción de casi 300 cazas F-35 Joint Strike Fighters. Este acuerdo complementa una adjudicación previa de 11.800 millones en diciembre de 2024, elevando el total a 24.300 millones de dólares . Con ello, el Pentágono busca reforzar su flota de aeronaves de quinta generación, ampliando las entregas y capacidades de la Fuerza Aérea, la Armada y el Cuerpo de Marines.