Redacción EXTRA
A 23 años de prisión fue sentenciado Alberto Giovanny Avilés Celis, de 47 años, luego de comprobarse su responsabilidad en delitos cometidos entre los años 2009 y 2011. Los hechos ocurrieron en el municipio de Jamundí, mientras ejercía como líder espiritual en una comunidad local. Durante ese tiempo, agredía sexualmente a sus víctimas, aprovechando su posición de confianza. Las investigaciones lograron recolectar pruebas suficientes para imputarle los cargos. Finalmente, fue capturado en el mes de abril de este año.
Avilés Celis vivió gran parte de su vida en Palmira, Valle del Cauca, donde también era conocido por su papel en actividades religiosas. Su imagen pública como guía espiritual generaba respeto y confianza en muchos. Sin embargo, detrás de esa fachada, escondía