La preocupación por el cortisol , conocido como la hormona del estrés , creció en plataformas digitales, donde proliferan mensajes que lo señalan como responsable de fatiga, insomnio y otros problemas de salud. Influencers de bienestar impulsaron la idea de que niveles elevados de esta hormona son la causa de numerosos males y que la solución está en consumir suplementos específicos.
Sin embargo, especialistas advirtieron que esa visión resulta reduccionista y puede inducir a errores en el cuidado personal. Según un informe de Science Focus , el papel del cortisol en el organismo resulta aún más complejo y esencial de lo que sugieren estas narrativas.
Demonización del cortisol en redes sociales
En entornos digitales, la demonización del cortisol es un fenómeno recurre