El Gobierno del presidente Gustavo Petro inició una ofensiva para reducir las tarifas de energía en la región Caribe, con la intervención de la empresa Air-e y la implementación de contratos que protegen a los usuarios de la especulación del mercado eléctrico. Estas medidas buscan garantizar precios justos y estables desde 2026, beneficiando a millones de usuarios en Atlántico, Magdalena y La Guajira, que durante décadas han sufrido con recibos de luz excesivamente costosos.
La estrategia incluye la convocatoria pública de Air-e a todos los generadores y comercializadores del país, con el fin de firmar contratos a largo plazo que permitan estabilizar los precios de la energía. Según el Gobierno, esta medida representa un cambio estructural, pues por primera vez se busca blindar a la pobla