El verano 2025 no sólo será recordado por las altas temperaturas y terribles incendios sino por e l resurgimiento de una nueva ola de vigilantes antinmigrantes. Grupos de personas de la derecha radical, en medio de un clima de xenofobia cada vez más difundido y con las redes sociales como amplificadoras, salieron de patrullaje a la “caza” de extranjeros supuestamente culpables de crímenes, pero también culpables por “quitarles” trabajo y subsidios a los locales, tomando la justicia por mano propia.
Esto ha ocurrido en Italia, en el norte de Irlanda, en España, en Holanda, en Polonia, en Islandia y en un momento de auge de partidos de derecha en el continente y de narrativas políticas marcadas por nacionalismo y soberanismo que abrevan de todo esto.
“Seguramente en su mayoría es algo más