Un migrante que falleció a causa del dramático tiroteo contra un centro de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en Dallas, Texas, había usado su cuerpo para cubrir a otro migrante y recibir los disparos , salvándole la vida a costa de la suya.
Los sueños del migrante mexicano Miguel Ángel García Hernández en Estados Unidos tuvieron un abrupto final en las últimas semanas, producto de un atentado contra una instalación de detención en Texas . El hombre, que tenía 32 años de edad al momento de la balacera, ya había sido herido por una de las balas cuando tomó una decisión que refleja cómo era su personalidad.
Cuánto le queda a Greg Abbott como gobernador de Texas: el día que concluye su mandato ICE arrestó al intendente de una escuela y