Es cierto, ninguna elección es igual, son tantas las variantes, circunstancias y desde luego las pasiones que nadie puede asegurar un triunfo o una derrota, es más, ni siquiera en estos momentos se puede hablar de que “alguien” ya tenga la candidatura en sus manos, y mucho menos que ya quede descartado o descartada por completo.

Sin duda la expresión de la gobernadora Maru Campos el pasado lunes, de 'Todavía no se ha muerto el rey, no es tiempo de la sucesión’ en lugar de calmar los ánimos al interior de su partido, aceleró esta carrera por la sucesión, que de nuevo pondrá a Chihuahua en un laboratorio político manejado en gran medida desde el centro del país.

De entrada es importante señalar que la gobernadora sin la menor duda sigue manejando el timing político, y no sólo dentro de su

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