Un accidente carretero protagonizado por un camión que transportaba grandes cantidades de cerveza enlatada desató la rapiña de los habitantes de la zona y conductores que circulaban por la zona.
Lo que comenzó como un accidente vehicular terminó en una suerte de carnaval espontáneo protagonizado por vecinos, curiosos y amantes del lúpulo (ajeno), aunque increiblemente, esta vez no ocurrió en México, sino en Paraguay.
El conductor del camión, que aparentemente perdió el control del vehículo —quizás por una curva traicionera o por el peso de tanta alegría embotellada— terminó volcado, esparciendo cajas y latas de cerveza a lo largo de la ruta como si fueran piñatas gigantes reventadas.
Lo más curioso (y viralizable) del asunto no fue el accidente en sí, sino lo que ocurrió después: al m