El pasado viernes, 3 de octubre, ocurrió un hecho que demostró la prolongación de los ataques en contra de los guardias del Instituto Nacional Penitenciario. En la cárcel Modelo de Bogotá, tres dragoneantes fueron heridos por un ataque sicarial. Uno de ellos murió y los otros están delicados hasta ahora.
La Fiscalía General de la Nación inició los procedimientos pertinentes y los investigadores empezaron a trabajar inmediatamente. Tras el hecho, se tienen tres hipótesis principales reveladas. Además, se formó un equipo especial para atender cada caso con la importancia requerida.
Sobre las 6:30 de la mañana, el centro penitenciario ubicado en la localidad de Puente Aranda, en Bogotá, fue el lugar de un atentado perpetrado por cuatro sicarios. Subidos en dos motos, desenfundaron sus armas