La deforestación avanza en silencio sobre los ecosistemas más valiosos de la Argentina. En Entre Ríos, el proceso fue tan sostenido que en apenas 15 años desaparecieron casi 58.000 hectáreas de bosques nativos, según un estudio de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (FAUBA). La pérdida equivale al 8,4 % de la cobertura forestal de la cuenca del río Gualeguay, una de las regiones más productivas y ambientalmente frágiles del Litoral.
En el mismo período, la superficie agrícola creció unas 57.700 hectáreas, un 9 % del área total. La expansión de la soja desplazó pastizales, montes y arbustales, y transformó el paisaje entrerriano en un mosaico dominado por cultivos. Los investigadores advierten que este cambio altera el ciclo del agua, reduce la biodiversidad y aume