La imprudencia de algunos prestadores de servicios turísticos volvió a quedar en evidencia este mediodía en la playa de Mismaloya, donde una familia vivió momentos de angustia luego de que su embarcación se volcara al intentar el desembarque en medio del fuerte oleaje que azota la costa vallartense.

De acuerdo con testigos, el operador de la embarcación ignoró las condiciones adversas del mar y procedió a acercarse a la orilla para dejar a los pasajeros, pese a que las olas rebasaban los límites seguros. En cuestión de segundos, una fuerte ola impactó la proa y provocó que la lancha se volteara.

A bordo viajaba una familia completa, incluyendo un bebé, quien por fortuna fue rescatado a tiempo por personas que se encontraban en la playa y por otros lancheros que acudieron al auxilio.

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