El magistrado deja fuera del juicio a cuatro investigados al no poderse acreditar que son los hombres que aparecen en los vídeos de las agresiones sexuales a adolescentes

La Fiscalía pide 107 años de cárcel a un hombre por ofrecer sexo con una niña de 13 años tutelada y grabar las violaciones

El juicio por violar y grabar las agresiones sexuales a una menor tutelada por la Generalitat no será el único que afronte T.L. El juez ha procesado al pederasta que formó una red de prostitución de menores y de distribución de pornografía infantil desde su piso del Raval de Barcelona en una segunda causa, en la que se han constatado agresiones sexuales a al menos cuatro menores de 16 años.

En un auto, al que ha tenido acceso elDiario.es, el juez Francisco Miralles, tras una exhaustiva investigación, acuerda procesar a T.L. y a otro hombre, F.M., al constatar que ambos podrían ser autores de “múltiples” delitos de agresión sexual sobre personas menores de 16 años, así como de inducción a la prostitución y distribución de pornografía con menores de edad.

Para otros cuatro investigados, el caso ha quedado archivado ya que, si bien mantuvieron conversaciones pedófilas con el líder de la red de pederastia, o bien no han sido identificadas por las víctimas en los vídeos o bien no existen más indicios para atribuirles agresiones sexuales. A uno de ellos sí se le ha abierto otra causa al localizarse en su teléfono contenido pornográfico infantil.

La Fiscalía comunicará en las próximas semanas cuántos años de cárcel pide para cada uno en esta segunda causa después de que en la primera, en la que únicamente está acusado T.L., el Ministerio Público le reclame 107 años de cárcel. Además, hay una tercera causa, todavía en fase de instrucción y con el mismo protagonista, la misma víctima (la menor tutelada por la Generalitat) y otros hombres que la violaron.

Según expone el juez, entre 2016 y 2022 el jefe de la trama de pederastia contactó con diferentes hombres menores de edad para después agredirles sexualmente y grabar en vídeo las agresiones. En cuatro de las víctimas que han declarado en la causa se repite una misma circunstancia: las agresiones empezaron cuando tenían menos de 16 años, la edad que fija la ley para el consentimiento sexual.

Con uno de los chicos, indica el juez, T.L. “mantuvo de forma repetida y habitual” relaciones sexuales desde que el menor tuvo 14 hasta que cumplió los 16 años , y le llegó a ofrecer dinero a cambio de las agresiones. A otro menor al que habría violado entre los 14 y 17 años de edad, además, T.L. también le habría ofrecido drogas además de dinero.

Otras dos víctimas contaban solo con 15 años cuando empezaron las agresiones, mientras que en otras tres se produjeron cuando tenían más de 16 años. En estas tres últimas, precisa el juez, las relaciones sexuales fueron consentidas por parte de las víctimas, pero no así su grabación.

“Los indicios que existen en la causa son más que suficientes para procesar al investigado, al constar en las grabaciones de los actos sexuales indicados y la filiación de varias de las víctimas”, resume el magistrado, que destaca que las cuatro víctimas menores de 16 años en el momento de las violaciones “han manifestado de forma clara y contundente” que mantuvieron relaciones sexuales con T.L. “y han dado detalles suficientes del modo en que ocurrieron los hechos”.

Respecto al otro procesado, el juez indica que aparece en chats con el líder de la red y que los vídeos incautados a T.L. lo sitúan en hasta ocho agresiones sexuales, aunque solo dos de las víctimas menores de 16 años lo han identificado de forma clara como autor de sus agresiones.