Los diputados del Congreso se llevaron el martes una de esas sorpresas que de vez en cuando ofrece el parlamentarismo. El PSOE iba a votar a favor de que se tramitase una . Era un primer paso, decisivo, para acabar prohibiendo los toros. Pero en el último momento y sin anuncio previo, se acabó absteniendo y provocó que la iniciativa muriera gracias a los votos en contra de la oposición.
Este gesto ha sentado muy mal al socio minoritario de la coalición, Sumar. El ministro de Cultura, Ernest Urtasun , acusó ayer a los socialistas de haber cometido "un grave error" al haber "hurtado la posibilidad de debate". También anunció que su Ministerio se había puesto a trabajar desde ayer para buscar la fórmula para volver a llevar la iniciativa al Congreso y que se pueda votar. "No vamos a perm