
El Rolex Masters 1.000 de Shanghái 2025 será recordado como el torneo donde Novak Djokovic , uno de los mejores tenistas de la historia, cedió ante sus propios límites físicos. A sus 38 años, el serbio, número 5 del ranking ATP , sufrió una dolorosa derrota en semifinales ante el monegasco Valentin Vacherot , quien, aprovechando la oportunidad, logró una victoria por 6-3 y 6-4. Este triunfo, además de ser histórico por lo inesperado, marcó la primera final de la carrera de Vacherot en un torneo de la categoría Masters 1.000 , un hito que lo coloca en los libros de historia del tenis.
Desde el inicio del partido, Djokovic mostró signos de agotamiento y malestar físico. A pesar de las victorias anteriores en el torneo, las constantes molestias, especialmente en la espalda, se hicieron evidentes a medida que avanzaba el encuentro. En el primer set, el serbio comenzó a sentir que su movilidad estaba limitada. Con un 3-3 en el marcador, Djokovic llamó al fisioterapeuta para que le ayudara con el dolor en la espalda, pero a partir de ese momento, el partido cambió de forma drástica. Vacherot , que llegaba de la fase previa, comenzó a capitalizar las debilidades de su rival y no tardó en romperle el servicio, llevándose el primer set 6-3.
Aunque en los primeros compases del segundo set Djokovic logró tomar ventaja, la situación de su espalda y las molestias en la pierna le impedían moverse con la agilidad habitual. Vacherot , consciente de que su oponente no estaba en su mejor momento, comenzó a hacer más largo el intercambio de pelotas, buscando desgastar aún más a Djokovic. El monegasco, con un servicio potente que superaba los 200 km/h, aprovechó los errores de su oponente, entre ellos dos dobles faltas consecutivas en el noveno juego, para colocar un 5-4 a su favor, con un set a punto de llevarse.
Djokovic, que había mostrado en otras ocasiones su capacidad para remontar en situaciones adversas, parecía esta vez al límite de sus fuerzas. El partido se convirtió en un constante ejercicio de supervivencia para el serbio, quien luchaba con todas sus fuerzas, pero las molestias físicas y la falta de movilidad no le permitieron desplegar su mejor tenis. Con una actuación más gesticulante de lo habitual, y tras un largo juego de más de siete minutos, Vacherot aprovechó su oportunidad y logró el ansiado break en el noveno juego del segundo set. A partir de ahí, el monegasco no dejó escapar su ventaja y se llevó la victoria con un 6-4, completando un partido que quedará en la memoria de los aficionados al tenis.
Para Valentin Vacherot , este triunfo es mucho más que una simple victoria en un torneo de Masters 1.000 . Representa un sueño hecho realidad, un sueño que comenzó hace solo unos días cuando pasó por la fase previa. Su nombre quedará grabado en la historia del tenis al convertirse en el jugador con el ranking más bajo en llegar a una final de un torneo de este nivel. Con 204 del mundo, Vacherot rompió las expectativas, no solo por vencer a uno de los mejores de todos los tiempos, sino también por el hecho de que su triunfo llegó en un momento de dificultad para Djokovic , quien, a pesar de su dolor físico, nunca dejó de luchar.
El gesto de Vacherot al final del partido también fue digno de mención. A pesar de la magnitud de su victoria, el monegasco no celebró de manera exuberante, consciente de que su oponente estaba mermado físicamente. Vacherot mostró una actitud de respeto hacia Djokovic , sabiendo que el resultado no reflejaba en su totalidad el nivel del partido si ambos jugadores hubieran estado al 100%. Su humildad al final del encuentro fue un reflejo de su madurez y de la ética deportiva que siempre ha caracterizado a los grandes campeones.