El miedo, terror y zozobra del primer impacto bajan lentamente como el agua de los ríos de la región norte de Veracruz .

Las dantescas imágenes de las crestas o golpes de agua inundando calles, avenidas, comercios y casas en Poza Rica, Álamo, Cazones y en docenas de comunidades y pueblos cercanos a los afluentes, siguen en la memoria de los sobrevivientes y damnificados .

Miles de personas mayores evocan las inundaciones de aquel lejano 1999 , una tragedia que se ha venido contando de generación en generación y que hoy los más jóvenes vivieron, sintieron y sufrieron en carne propia.

Quizá jamás se pueda comparar con los cientos de fallecidos de aquel año que aún permanecen en la memoria y en los altares de Día de Muertos (se dice que fueron 384 fallecidos y 450 mil d

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