El 12 de octubre de 1995, en plena posguerra de Bosnia-Herzegovina, el Gobierno local de Mostar decide renombrar la plaza Hit como Plaza de España, en homenaje a los 23 militares españoles fallecidos durante la misión de paz de la ONU en el país. Este gesto simbólico reconoce el papel crucial de los cascos azules españoles en la protección de civiles, la distribución de ayuda humanitaria y la reconstrucción de infraestructuras en una ciudad devastada por el conflicto. La plaza, situada en el corazón de Mostar, se convirtió en un espacio de memoria y reconciliación, donde ondean las banderas de España y Bosnia junto a una placa con los nombres de los soldados caídos.
La participación española en Bosnia, iniciada en 1992 bajo el mandato de la ONU, marcó un punto de inflexión en la proyecc