Lali Espósito volvió a demostrar por qué es mucho más que una estrella pop: es un fenómeno de conexión emocional con su público. En su reciente paso por Sevilla, durante la gira No vayas a atender cuando el demonio llama, la cantante argentina protagonizó un episodio que trascendió la música y se convirtió en un símbolo de amor, diversidad y empatía.
El hecho ocurrió en la Sala Pandora, donde Lali ofrecía un show con entradas agotadas. Entre luces, baile y ovaciones, la artista se detuvo de improviso al notar la presencia de un fan que pedía hablar. Lo que parecía un simple intercambio se transformó en una de las escenas más conmovedoras del tour: el joven, un seguidor brasileño, tomó el micrófono para pedirle matrimonio a su novio argentino frente a todo el público.
El gesto inesperado