El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , ha abandonado rápidamente la recepción real con motivo de la Fiesta Nacional del 12 de octubre sin pararse a hablar on los medios de comunicación presentes, algo que es común en estas ocasiones.

En una descortesía protocolaria poco habitual, Sánchez se marchó del Palacio Real sin realizar el tradicional corrillo con los periodistas acreditados, un momento que el presidente siempre había aprovechado para comentar la actualidad con los profesionales de los medios. El imputado fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz , tampoco se ha quedado al cóctel y los corrillos con la prensa alegando «motivos personales» .

El jefe del Ejecutivo, cercado por los casos de corrupción que afectan a su partido, a su Gobierno y a su entorno familiar, únicamente se ha limitado a saludar a los Reyes en el besamanos, donde no ha estado acompañado por su mujer, la pentaimputada Begoña Gómez .

Sánchez ha justificado su ausencia alegando el viaje que realiza este domingo a Egipto, donde asistirá a la firma del acuerdo de paz para poner fin a la guerra en Gaza. Sin embargo, su vuelo no despega hasta esta noche, por lo que habría tenido tiempo suficiente para cumplir con las obligaciones protocolarias.

El líder socialista se encontrará en Sharm el-Sheij con  Donald Trump , que confirmó hace dos días su asistencia, después de que el presidente de Estados Unidos haya cargado contra el Ejecutivo español al decir que «España debería ser expulsada de la  OTAN» . Trump ha sido quien ha impulsado el acuerdo de paz con  Israel  que  Hamás  firmó el pasado jueves. Éste establece una  primera fase  que aborda la liberación de rehenes, la entrada de ayuda humanitaria a Gaza y la retirada parcial de tropas israelíes del enclave palestino.

El fiscal general, también ausente

Por su parte, el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz , tampoco se ha quedado al cóctel y los corrillos con la prensa alegando «motivos personales» . Una ausencia significativa teniendo en cuenta que su juicio arranca en apenas tres semanas, esto es, del 3 al 13 de noviembre . García Ortiz se sentará en el banquillo por la comisión de un delito de revelación de secretos que habría cometido al facilitar a un medio de comunicación el contenido de un correo electrónico confidencial entre el abogado del novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Alberto González Amador , y el fiscal del procedimiento contra él.

Entretanto, este domingo el presidente del Gobierno ha vuelto a ser abucheado a su llegada para asistir al desfile militar con motivo de la Fiesta Nacional del 12 de octubre. Gritos de « ¡Sánchez, hijo de puta!» o «¡fuera, fuera!»,  son algunos de los improperios que una gran multitud de personas han lanzado contra el jefe del Ejecutivo mientras saludaba a las autoridades presentes en el madrileño Paseo de Recoletos.

Sánchez ha aparecido en la zona de autoridades  justo poco antes de las 11 de la mañana , en medio de un amplio blindaje de Moncloa, mientras el coche de los Reyes se aproximaba ya al lugar del acto institucional. Los monarcas sí han sido recibidos con aplausos y gritos de « ¡Viva el Rey!» .

Con todo, y pese al amplio dispositivo de seguridad, que mantenía a los ciudadanos alejados de la zona de autoridades, el líder socialista no ha podido escaparse del  grito que se ha hecho común  en las fiestas locales de España en los últimos meses y que se ha viralizado en redes sociales: « ¡Pedro Sánchez, hijo de puta!» .