Octubre tiene cada año una semana plagada de actos. Suele ser, además, una semana de gran actividad judicial tras un septiembre, por lo menos es Barcelona, con festividades que llevan a puentes con buen tiempo.
Actos de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, actos de nuestra Festividad Nacional el 12 de octubre y, a priori, la agenda se convierte en un ir y venir que puede llegar a ser agotador físicamente, pero espiritualmente una auténtica carga de pilas para el resto del año.
Somos sí, España, con nuestros Guardias Civiles, con nuestros Policías Nacionales. Es la sensación de sacar lo mejor de nosotros mismos y en mi caso reencontrarme en los actos con aquellos que alguna vez recurrieron a mí para que les defendiera, aquellos con los que vivimos algunas cosas que aún hoy no se pue