Por muchos años, la industria de la moda se inclinó por el uso de pieles de origen animal para la fabricación de prendas de lujo. Si bien esta práctica ha perdido peso con el tiempo, este tipo de material aún sigue siendo muy cotizado en algunos sectores.

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Uno de esos insumos que ha ganado popularidad es el pirarucú, un pez amazónico de río que califica como especie exótica y que protagoniza un modelo de pesca sostenible en Brasil. Su estatus es atribuible a su piel gruesa, tamaño y patrones.

Durante generaciones, este tipo de pescado fue un alimento básico, y su piel se desechaba como residuo. Pero eso cambió cuando los diseñadores comenzaron a utilizarla como alternativa al cuero tradicio

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