Texas derrotó ayer 23-6 a los Sooners de Oklahoma, sexto sembrado, en un partido clásico que no defraudó a más de 92 mil almas en el Cotton Bowl de Dallas.
Los "locales" despertaron en la segunda mitad tras ir perdiendo 6-3, los Longhorns anotaron 20 puntos sin respuesta en los últimos dos cuartos.
La defensa de los Sooners, que promediaba 7.2 puntos por partido, no estuvo al nivel.
Ryan Niblett devolvió un despeje de 75 yardas para un touchdown en el cuarto periodo, para sellar el triunfo que seguramente devolverá a Texas al Top 25 de la nación.
Arch Manning no cometió errores y completó 21 de 27 pases para 166 yardas, mientras que el quarterback de los Sooners, John Mateer, completó 20 de 38 pases con tres intercepciones.
Oklahoma no pudo sentirse cómodo en el emparrillado y eso se